Tres Formas de Mejorar la Preparación para el Aprendizaje Mediante el Juego.

¿Puede su alumno mejorar sus habilidades de aprendizaje?

¡Sí! De hecho, es más fácil y divertido de lo que cree. Puede mejorar la preparación para el aprendizaje de su hijo de formas que se sientan como un juego.

Comencemos con una mejor comprensión de la preparación para el aprendizaje. No se trata de lo rápido que puedan terminar un cuestionario de matemáticas cronometrado, ni de lo bien que impriman. La preparación para el aprendizaje ocurre después de que las habilidades de desarrollo fundamentales están en su lugar.

Los estudiantes que están listos para aprender saben cómo asimilar y dar sentido a la información que les rodea. Saben reconocer patrones. Pueden considerar diferentes explicaciones antes de seleccionar la más probable. Este tipo de resolución de problemas debe ocurrir al realizar aritmética, lectura y escritura. Sin embargo, estas habilidades se desarrollan primero fuera del aula.

No puede lograr esto con más hojas de trabajo de matemáticas o práctica de impresión. ¿Cómo puede ayudar a su alumno a mejorar su preparación para el aprendizaje? La respuesta puede sorprenderte.

La preparación para el aprendizaje solo ocurre cuando los componentes básicos del desarrollo encajan en su lugar. Si su alumno tiene algunas brechas en el desarrollo, no se desespere. Estos vacíos se pueden llenar con actividades que se sientan como un juego.

Aquí hay tres formas de usar el juego y la psicopedagogia para mejorar la preparación para el aprendizaje de su alumno.

Intenta una vez más La primera área en la que debe concentrarse es en mejorar la capacidad de su hijo para practicar estrategias de "prueba una vez más".

Empiece por ampliar la capacidad de atención de su hijo haciéndolo "aguantar" un poco más. Juegue con ese juguete un poco más, trabaje en resolver ese rompecabezas difícil un momento más, lea un poco más y anímelos a "seguir con" la tarea que les asignó, solo un poco más.

Haga de este objetivo suyo, diseñado para ayudar a su hijo, en un secreto. Sin hablar de ello, comience a modelar este comportamiento usted mismo y cuando jueguen juntos.

Si está jugando un juego con autos de juguete, alargue el juego un poco más agregando una dimensión nueva y creativa. Quizás disfrute de que los autos conduzcan hasta un estacionamiento simulado en el zoológico simulado.

Si su hijo está leyendo un cuento, pídale que mire las imágenes un poco más. Pídale a su hijo que describa todas las cosas que están rojas en la imagen o todas las cosas que hacen un sonido.

Invente una nueva forma de jugar con el juego de bolos del patio trasero y enséñele a su hijo a desarrollar su imaginación.

Enseñar a su hijo a estirar su imaginación para "jugar más" ayudará a mejorar la capacidad de atención para las actividades académicas.

Busque oportunidades para que su hijo "piense un poco más" o "intente una vez más". Anime y apoye su esfuerzo. Ayude a su hijo a disfrutar de la sensación de que su mente soluciona con éxito un problema.

Enseñarle a su hijo a "aguantar", resolver problemas y ejecutar un intento más puede ayudar a mantener la mente ocupada de una manera productiva. Eso puede ser intentar una vez más encontrar el calcetín perdido o resolver el problema de cómo volver a colocar esa rueda de bicicleta en el cuadro de la bicicleta. Podría ser encontrar la mejor solución al acertijo del día o terminar su tarea de forma independiente.

Queremos que los niños disfruten usando sus mentes y desarrollen estrategias de "prueba una vez más ...". Los necesitarán en la escuela y por el resto de sus vidas.

Mejorar la conciencia espacial

Estar preparado para leer, escribir y realizar operaciones aritméticas requiere una buena conciencia espacial. Si la conciencia espacial no es innata y automática para el niño, lo académico será un desafío.

Esto significa que los niños deben comprender el espacio tridimensional. Tienen que ser capaces de navegar con su cuerpo físico en, por encima, por debajo, a través, alrededor y explorar todas las relaciones espaciales físicas.

Navegar por el espacio nos parece simple porque con solo un vistazo rápido, podemos ver fácilmente cómo navegar al baño en un restaurante concurrido y desconocido. El sentido visual del espacio se desarrolla después de experimentarlo físicamente. Puede que no recordemos haber aprendido esta habilidad, pero seguramente la aprendimos.

Nuestros hijos también necesitan aprender esta habilidad. Deben aprender las palabras para describir el espacio físico y poder separarse de ese espacio.

La capacidad de separarse les permite aprender a observar los objetos, las personas, los lugares y las cosas que se encuentran en el espacio que los rodea. Esto, a su vez, se convierte en la capacidad de juzgar visualmente el espacio sin tener que moverse físicamente por la habitación.

El desarrollo de la conciencia espacial se puede lograr muy bien a través de los juegos. A continuación, se muestran algunos ejemplos de juegos que a los niños les encanta jugar y que también desarrollan la conciencia espacial:

  • Simón dice
  • Al escondite
  • Luz roja, luz verde
  • Chutes and Ladders (juego de mesa)
  • Carreras de obstáculos
  • Búsqueda del tesoro

Su hijo nunca sabrá que realmente está trabajando para desarrollar su preparación para el aprendizaje.

El alumno que tiene dificultades para secuenciar, razonar y resolver problemas de forma independiente literalmente necesita movimiento físico (a menudo más beneficioso que la tarea adicional) para facilitar el pensamiento eficaz.

Equilibrio y movimiento

La capacidad de experimentar físicamente el mundo que nos rodea se basa en el sistema sensorial que percibe el movimiento en relación con el espacio que nos rodea. Este sistema sensorial es el sistema vestibular. El sistema vestibular proporciona a nuestro cerebro una fuerte necesidad de mantener el equilibrio.


Nuestra necesidad de equilibrio notifica al sistema muscular y articular. Este sistema tiene su propio conjunto de receptores, llamados propioceptores. El sistema propioceptivo permite que el cuerpo responda suavemente a diferentes cambios en el centro de gravedad.

La mayoría de las actividades físicas requieren la integración del sistema vestibular con el sistema propioceptivo.

Cuando estos sistemas funcionan juntos correctamente, el estudiante está listo para aprender.

En muchos alumnos, estos sistemas no funcionan correctamente. Esta es una gran razón de su lucha académica. Afecta la capacidad de sentarse en una posición lista para aprender. Afecta la capacidad del estudiante para mirar y escuchar. Distrae su atención a un nivel subconsciente, ya que su cerebro presta atención a la información del sistema vestibular que indica que el estudiante podría caerse de la silla. Estas son solo tres de las cientos de formas en que estos sistemas afectan la preparación para el aprendizaje.

El movimiento, el ejercicio, los deportes, las artes marciales, el yoga, el baile y los malabares ofrecen excelentes oportunidades para que los sistemas de movimiento y equilibrio estimulen y ayuden a facilitar el funcionamiento del cerebro.

Puede apoyar el crecimiento de su alumno  incorporando el movimiento como parte del combustible necesario para hacer crecer el cerebro. Un estudiante más típico puede parecer responder bien a la práctica, la práctica y la práctica. Un alumno  parece responder mejor a la práctica, el movimiento, la práctica, el movimiento.

Cuanto más juegues "estratégicamente" con tu alumno, más mejoras verás en su preparación para el aprendizaje.

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